jueves, 15 de septiembre de 2011

Sobre mi barrio y algunas cosas más

(Me han rayado la cara porque no podían soportar lo guapo que soy...)

Aunque todavía no he empezado las clases, sí que me ha tocado ir y venir de la Universidad alguna que otra vez (y las que quedan) para seguir solucionando mi papeleo. Por eso, ya he logrado mi Carné de Estudiante Universitario, y sólo me queda elegir al fin mis asignaturas, lo cual debería ocurrir este viernes... a la misma hora que la semifinal del Eurobasket...

Como ya comenté en la anterior entrada, la llegada a mi residencia no ha sido precisamente idílica, con un conserje que nunca está en conserjería, y si lo está, parece estar en otro mundo, y la mitad de las cosas de la habitación sin funcionar correctamente (el agua caliente ha vuelto, pero los hornillos siguen igual y la toma de antena de la TV está de decoración).

El único consuelo que me queda es que no soy el único en la misma situación, pues al tener que ir al cibercafé-lavandería (sí, leéis bien) que hay frente al portal, para imprimir papeleo, me encontré a otra española de Erasmus y viviendo en la misma planta que yo. Casi, casi que me puedo sentir afortunado, teniendo en cuenta que ella no tiene ni electricidad ni Internet en su piso, y encima le han dejado el baño asqueroso... Y no, no voy a comentar nada del hashtag que os habéis sacado de la manga (#lavecinadeEloy), cabrones XD

Pero bueno, como sigo teniendo bastante más tiempo libre del que me gustaría (algo que se puede acabar, si como me temo, me dan jornadas de clase de 8 a 19h...), he podido hacer un pequeño reportaje sobre "mi barrio", el 19ème arrondissement.

Empiezo por mi calle, donde hice un par de fotos, separadas por apenas unos treinta metros, para ilustrar lo que ya comenté la semana pasada: por un lado, los negocios musulmanes como este Hammam; por otro, la calle judía, con tiendas que bien podrían ser patrocinadores del Maccabi por sus nombres, e incluso una agencia de viajes especializada en turismo en Israel. En parte, mola lo de vivir en una zona multicultural (no me atreví a hacer fotos en el Centro de Acogida, eso sí...), pero también fastidia un poco lo de que las tiendas te dejen tirado los viernes y sábados...


Otra curiosidad en mi calle es que hay otro monigote como el que me encontré en el puente camino de Aubervilliers. Resulta que la ciudad está plagada de ellos (me encontré otro junto a mi facultad, muy apropiado dado el entorno arquitectónico, ya veréis en una próxima entrada), y se trata de obras de un artista (?) llamado Invader, que hará trece años comenzó a llenar París de personajes recordando la estética de los videojuegos setenteros-ochenteros. Sea o no arte, la verdad es que te entretienes buscándolos.

Pero bueno, os dije que os iba a enseñar el barrio. Aunque el urbanismo y la arquitectura no forman parte, ni de lejos, de mis mayores aficiones, algo si recuerdo haber oído en el colegio de que, bajo el poder de Napoleón III, el Barón Haussmann se encargó de renovar toda la ciudad, una labor que duró prácticamente toda la segunda mitad del siglo XX (y que creo recordar que se puede leer en "La Taberna" de Zola).

Así, echaron abajo prácticamente todo el legado medieval del centro, la ciudad absorbió las poblaciones dentro de la Muralla de Thiers, y se dedicaron a construir anchas y largas avenidas que atravesaran toda la ciudad (para el que le interese, que mire aquí). El 19ème Arrondissement forma parte de esos "pueblos" adquiridos, e incluso tiene Ayuntamiento propio, que podéis ver aquí debajo.


Con la renovación, todos estos "pueblos" se vieron atravesados por bulevares y avenidas que sirvieran de acceso y salida de la ciudad. De hecho, mi calle es una paralela a la Avenida Jean Jaurès, una larguísima recta que va desde la frontera con el 10ème Arrondissement hasta la Puerta de Pantin. Cuando digo Puerta, que nadie piense en ningún monumento tipo la Puerta de Alcalá. Supongo que en su momento habría una gran puerta, pero la muralla que separa el París "intramuros" de los pueblos de alrededor hace tiempo que no existe, y hoy en día simplemente hay un paso bajo la ronda de circunvalación, o Périphérique, que parece estar siempre en obras.


Junto a esa delimitación, entre las Puertas de Pantin y la Villette, está el Parque de la Villette, llamado Parque por llamarlo de alguna manera. En realidad es una enorme explanada, cortada por el Canal de l'Ourcq.

Allí solían estar los mataderos, cuya estructura se ha conservado, y en los años ochenta se aprovechó para usos culturales. Así, allí están la Ciudad de las Ciencias y la Industria (aquí más, por si os parece pequeña), con su famosa Geoda, la Ciudad de la Música, un teatro, la sala de conciertos Le Zénith (que debía ser temporal, y lleva 25 años allí), un Convervatorio, y bastantes esculturas modernas. Además están construyendo un nuevo recinto para la Filarmónica de París, de ahí tanta grúa.

Si queréis mi opinión, no me gusta mucho, ya que hay poco verde, y parece un lugar bastante caótico al mezclar tanto edificio moderno con algunas casetas que aún se conservan de su pasado... Por eso, prefiero el Parque Buttes-Chaumont, detrás de mi casa, que es donde suele ponerse la gente a hacer deporte. A ver si la pierna me deja de doler del todo y retomo el #iron_nerd. De todos modos, hay que admitir que al menos el Parc de la Villete rompe con los alrededores, fieles seguidores del Satanismo Arquitectónico que tanto gusta al gran Vicisitud y Sordidez.


Y para cerrar, una ronda de curiosidades... Aquí un cartel que me encontré en la plaza del Ayuntamiento. Como ya os dije, mi barrio está plagado de calles con referencias bélicas, y en este caso esto es una réplica del cartel que se pegó por todo Londres tras el discurso del General de Gaulle el 18 de Junio de 1940. Ya sabéis lo querido que es De Gaulle por estos lares...


También me ha resultado curiosa la gran cantidad de McDonald's que hay por aquí. Creo que son cuatro en un kilómetro, junto a un Quick (habrá que colaborar en el pago del asiento de d'Ambrosio en Virgin...) un Domino's Pizza y un Pizza Hut. Y yo que pensaba que Francia era uno de los países más reticentes a la comida rápida.


Y por último, los carriles bici. Sé que algunos de vosotros me váis a matar, especialmente si me lee Chicho, pero en una semana ya he estado a punto de ser atropellado dos veces. Aquí los carriles bici están todos pintados sobre las aceras. Y claro, cuando estás leyendo, jugando con el móvil, usando el MP3, o simplemente haciendo fotos, como que no te enteras de por dónde vas... pero bueno, me está sirviendo para que me recuerden los insultos más habituales en francés.

A ver si para la próxima os puedo enseñar mi facultad. Que nadie se piense que voy a estudiar en edificios medievales y llenos de historia. Me quedé muerto al ver el edificio... pero eso será la próxima.

4 comentarios:

  1. Muy guapa la entrada. Me flipan las ciudades, sobretodo cuando se enseña la parte más mediocre, todo esos edificios ochenteros que en su momento parecerían de la era espacial y ahora empiezan a verse un poco cutres :D Me molan.

    Lo que más me ha gustado es la foto de los dos pavos haciendo footing. Ahora que he patentado la 'crisis de los 22' y salgo a hacer deporte unas cuantas veces a la semana, no paro de pensar si en Munich (es pronunciarlo y cruzar los dedos) tendré un sitio cerca para salir a correr.

    Tanto que te quejabas, te lo tienes que estar pasando teta.

    ResponderEliminar
  2. No te creas que me lo estoy pasando tan bien, porque hay poco movimiento por el momento, pero bueno, ya llegará.

    Sobre Munich, estoy seguro de que los alrededores del Estadio Olímpico son una zona perfecta para hacer footing. Avisa de cuando te instales allí, que hay nocturno París-Munich XDDD

    ResponderEliminar
  3. Pues salvo por la cara cortada y el piso (dos detalles sin importancia. :P ), creo que no te puedes quejar demasiado. El barrio parece que está bastante bien y el parque ese que tienes detrás de casa está de lujo, la verdad.

    Sigue disfrutando lo que puedas y vete dejándonos más Invaders de esos, que me ha resultado muy curioso el trabajo de ese artista. :D

    ResponderEliminar
  4. ¡Me encanta el Invader! Ya me gustaría que mi facultad estuviese decorada así.

    ResponderEliminar